¡Ya están aquí! Son los anuncios de los coleccionables en kioscos que, como los turrones en Navidad, nos avisan de que agosto está en las últimas y es tiempo de prepararnos para el otoño. Hasta hace unos años los cursos de idiomas por fascículos eran los primeros en asaltarme. Este año no. Ha sido el Titanic, el coleccionable de modelismo de la editorial Salvat, el que se asoma una y otra vez a mi televisor en una cruel metáfora de las ilusiones con las que comenzamos el nuevo curso y los muchos propósitos que nos hacemos (que luego retomaremos con el cambio del año) y cómo en poquito tiempo quedan destrozados tras chocar con el iceberg de la realidad. En el vídeo de arriba pueden ver cómo acaba la historia. En el de abajo, cómo empieza todo. A partir de ahí pónganse a cubierto, porque pronto vendrán las miniteteras de colección, las princesas de cuento o la casa gigante de muñecas enanas. Y todas saldrán a su encuentro cuando menos lo espere. Se lo aseguro. Garantía TELEpatético.
Monday, 24 August 2009
Preparados para el impacto
Labels:
Críticas
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment