¿Se acuerdan de Doctor en Alaska? Pues esto es, pero no es.
Antena 3 ha estrenado El síndrome de Ulises, comedieta
costumbrista (otra más) con la que
pretende explotar el tirón de Miguel Ángel Muñoz, uno de los actores-guaperas de
Un paso adelante. No en vano
toda la serie gira en torno a él, como pasaba con
Rob Morrow en Cicely (Australia), pero llevando la historia a
un barrio marginal que se presupone del extra radio madrileño. El argumento es el mismo, o casi:
a un doctor recién licenciado le juega una mala pasada la vida y acaba en un destino que no es ni de lejos el que tenía en sus planes. Si allí el contraste era ver a un tipo de
Nueva York sobreviviendo en un pueblo remoto aquí la gracia está en ver a
un pijo de La Morajela (se presupone)desenvolviéndose en un
mercado reconvertido en ambulatorio y
lleno de chusma, inmigrantes y gente humilde... pero todo el personal muy entregado por ayudar al prójimo.
¿Que si lo hace bien el muchacho? Es difícil saberlo, quizás se podría medir su nivel interpretativo si fuera él uno de los drogatas del barrio, uno de los jóvenes padres de familia que no llega a fin de mes o que deja a sus hijos (bebé incluido) con el primero que se pasa por casa para salir huyendo. Pero no, MAM vuelve a hacer de pijillo, de carne de gimnasio, de exhibidor de pectorales. Otra historia, otra serie, pero el mismo personaje. Y claro, eso lo borda, aunque uno sabe muy bien qué hay ya de verdad y qué de personaje.(Tampoco qué hace tanta gente por ahí si luego sólo se le ve a él). Y claro, visto sólo un episodio resulta difícil juzgarlo. ¿Que hay que decir algo? Pues... Paracetamol y mucho agua.
[El síndrome de Ulises se emite los martes a las 22.00 h. en A3]
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