Tranquilos. Belén Esteban no está a punto de comerse la cabecita de Jorge Javier Vázquez. Criaturita. No. Es un efecto óptico logrado por el gran equipo técnico de Sálvame diario en el que la madre de Andreita está atrapada en un rompecabezas hecho con monitores de televisión y Jorgito Javier está presente, de carne y hueso, hablando de la susodicha madre, que es una de las señoras que más habla y de la que más se habla en este programa que se retroalimenta con las propias historias de sus trabajadores. Un día es Lydia Lozano y su miedo a ver a Bruce Willis en El Sexto Sentido y otros tipos venidos del más allá y otras tantas veces es la propia mamá de Andreita hablando de Andreita, su papá y la señora de papá, la tal Campanario a la que culpa de todos sus males.
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Pero el Defensor del Menor de Madrid dijo ayer basta y exigió a la mamá de Andreíta que se coma ella el pollo y deje a la criatura en paz, que ya vale de hablar a todos horas por la tele y las revistas de su hija y del entorno familiar que la envuelve y protege, porque la criaturita es, hoy por hoy, una menor a la que la ley le ampara a salvaguardar todos sus derechos, también el de la intimidad. Esto, en palabras que la mamá de Andreíta pueda entender, significa que hay que darle tiempo a la criatura para que prepare su propio papel protagonista en el spin off que acompañe a las andanzas de mamá allá por el año 2017, que es cuando Andreíta cumplirá los 18 años y será, por lo tanto, mayor de edad para ir a la tele, como el nene de Antonia Dell Atte fue a contarnos, también a Sálvame, lo majo, simpaticote y guapetón que es, lo bien que se vive siendo hijo de papá y mamá, y lo mucho que le gustaría vivir sin dar un palo al agua como a papá Lequio.
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Y en Tele 5 ya están a la espera de que el peque de Anita Obregón sople también sus 18 velas, superando así la edad de mamá, y nos confiese si eso de morder micrófonos crea adicción o si, por el contrario, ha conseguido superarlo con el tiempo. Aunque Jorge Javier Vázquez lo que querrá saber en realidad es si Álex sigue haciendo calvos cada vez que una cámara se le pone por delante... o por detrás. Incluso habrá quien intente que se enfrente en un debate verbal con el nene de Antonia y continúe el circo televisivo que un día protagonizaron sus mamás. Evitar que eso suceda también puede ser, por qué no, el papel de El Defensor del Menor, ahora que está a tiempo como ocurre con Andreíta. Para otros hijos de famoso quizás sea ya demasiado tarde. Belén Esteban debería reflexionar sobre el toque de atención y no montar un especial en el Sálvame nocturno para seguir ingresando pasta a cuenta de los misma y de la misma. Y si tan mal le parece, que denuncie al Defensor del Menor, para ver quién lleva razón. Pero que una madre hable así del padre de una menor y airee todas sus miserias y disputas muy bueno para la criatura no parece que sea, no.
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[Sálvame se emite de lunes a viernes a las 15.45 h. en Tele 5]
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