
Vale, lo admito. Ver a Mikel Erentxun metido en el papel de director de coros (en el programa le llaman "mentor") entregado a la causa me ha dejado sin palabras. Y he tardado en reaccionar. Hasta hoy que voy a intentar plasmarlo en palabras: ¿Qué pinta ahí? Admito que el papel le queda bien a Soraya (a la que mejor, con diferencia), a Manu Tenorio, a Lolita, menos a Marta Sánchez (pero infinitamente mejor que su nada creíble paso por El Gran Quiz) pero ¿¡¡¡Mikel Erentxun!!!? A estas alturas ya sabrán que el estreno ha sido una catástrofe. No es para menos, el programa es una calamidad. Que no es que los coros canten mal. Pero ese intento para que el espectador se alíe con un personaje famoso para defender su coro resulta tan forzado... Casi tanto como justificar todo el tinglado con una donación a una ONG. Sorprende que alguna mente pensante haya creído que esto puede funcionar.
Y sorprendería tanto o más que realmente funcionara y no tuvieran que cancelarlo y adelantar la final a toda la prisa. Pero son las cosas de Cuatro. Que cuando uno cree que ha cogido el rumbo sorprende con cosas como ésta...


[La batalla de los coros se emite el miércoles noche en Cuatro]
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