Las teles quieren tu dinero

Las teles quieren tu dinero. El Gobierno español ya ha anunciado su disposición a conceder nuevos canales de pago a través de la TDT, algo que hasta ahora habían intentado retrasar a la espera de que el personal se sumara de una vez a la nueva tecnología (falta menos de un año para el apagón analógico) con el anzuelo de más canales por la patilla. Pero la crisis económica ahoga y las teles ven que tanto gasto en competiciones deportivas no se va a poder amortizar con la publicidad y, claro, quieren que el espectador suelte la choja. Y sin esperar siquiera al apagón, como se esperaba, el Gobierno anuncia ya su voluntad a abrir la TDT al pago directo de los telespectadores, como en su día ocurrió con Canal Plus. Las teles estaban tan nerviosas porque la medida no llegaba que ya estaban pensando en casarse entre ellas y el término fusión había saltado al vocabulario de La Sexta, Antena 3 y Tele 5.

Del atropellado anuncio del Gobierno español, a través del Ministerio de Industria, se deduce que se abre ya la puerta, aunque todavía se tardará en valorar las peticiones y otorgar las licencias. Si bien lo que más inquieta de su comunicado es que no se abre un nuevo concurso para buscar operadores que quieran explotar la TDT de pago sino que se dirigen a las empresas que ya disponen de canales gratuitos por si quieren "modificar" sus concesiones, lo que deja la puerta abierta a que desaparezcan canales gratuitos que pasarían a ser de pago o implanten un modelo mixto, de forma que comiencen a cobrar por algunos programas o acontecimientos deportivos. Porque el Gobierno lo que único que garantiza es que se seguirán emitiendo de forma gratuita los acontecimientos deportivos "de interés general", nada dice de que se asegurarán que se mantengan, cuanto menos, los mismos canales gratuitos que hay en la actualidad. Dicho de otra manera, barra libre para tener TDT de pago sin contraprestación de TDT gratuita. Nada, nada, todo sea porque TVE1 vuelva a ser el mejor (¿y único?) canal de televisión español.

El Gobierno también añade, lo que ya se sabía: habrá que cambiar todos los receptores de TDT si se quiere disfrutar de las nuevas prestaciones de la TDT de pago (otro gran negocio para los que fabrican estos aparatejos) porque los que están hoy en el mercado no valen, y a su vez se sorprenden que cuando falta menos de un año para el apagón haya tantos ciudadanos que aún no disponen del dichoso aparatito. Como si en estos tiempos se crisis sobrara el dinero. Y luego, claro, quieren que les tomemos en serio... Mientras, decenas de asociaciones de consumidores piden que se regulen esos peligrosísimos concursos telefónicos que pueblan la TDT y provocan agujeros estratosféricos en las facturas del teléfono, pero para eso el Gobierno español no tiene prisa, interesa más regular la TDT de pago, no vaya a ser que los grandes empresarios pierdan no ya su inversión, sino los astronómicos beneficios que deberían obtener. El agujero negro que causan estos concursos a las más humildes familias y la imagen de país tercermundista y de pandereta que dan esos concursos de la TDT no preocupa tanto al Gobierno como para regularlo con la misma celeridad, cuanto menos, que la dichosa TDT de pago. Pues qué triste.